La aparición de las finanzas descentralizadas (DeFi, por sus siglas en inglés) ha supuesto un desarrollo apasionante en el ámbito de las criptomonedas, creando una nueva ola de servicios financieros de activos digitales basados en la confianza.
Gracias a la tecnología blockchain, DeFi elimina la necesidad de terceros centralizados y, en su lugar, cambia la forma en que interactuamos con nuestras finanzas, proporcionando transacciones seguras y privadas que están abiertas a todos, independientemente de la geografía o el origen socioeconómico.
Al mantener la descentralización y la transparencia, los productos DeFi pueden permitir formas no tradicionales de inversión, al tiempo que mitigan el riesgo y proporcionan un mayor acceso a los activos mundiales mediante protocolos contractuales inteligentes.
Veamos por qué DeFi está allanando el camino para unas transferencias de dinero digital más rápidas y fiables, y por qué podría ser crucial para impulsar su adopción en los países en desarrollo.
Poco sobre las finanzas descentralizadas (DeFi)
Finanzas descentralizadas (DeFi) es una palabra de moda en el mundo de las criptomonedas en este momento, ya que aporta una forma única y revolucionaria de crear, gestionar e invertir dinero digitalmente.
DeFi utiliza protocolos basados en la tecnología blockchain para operar un sistema financiero abierto y sin permisos que permite a los usuarios controlar sus activos. Significa que no hay mediador para estas transacciones.
En su lugar, los usuarios poseen la propiedad exclusiva de los activos en todo momento, lo que supone una seguridad mucho mayor a la hora de realizar transacciones financieras.
Este nuevo modelo descentralizado aporta mayor seguridad al intercambio de criptoactivos, al tiempo que ofrece bajos costes de transacción y una rentabilidad potencialmente elevada, lo que convierte a esta tecnología en una opción deseable en los sectores financieros de todo el mundo.
Finanzas descentralizadas (DeFi) frente a finanzas centralizadas
El sector de las finanzas de criptomoneda se caracteriza por dos estructuras principales: Finanzas Centralizadas (CeFi) y Finanzas Descentralizadas (DeFi).
La principal diferencia es que CeFi procesa los datos a través de entidades centralizadas con menor riesgo. En cambio, DeFi procesa los datos mediante algoritmos y protocolos descentralizados, lo que se traduce en un nivel de seguridad mucho mayor con rendimientos iguales o más significativos.
Aunque ambos ofrecen un gran potencial a sus usuarios, DeFi se ha hecho popular por sus capacidades innovadoras, como la creación de acuerdos autoejecutables, transacciones más seguras y acceso a servicios de préstamo con sólo depositar activos digitales en un protocolo.
En última instancia, tanto CeFi como DeFi tienen ventajas e inconvenientes que deben sopesarse entre sí para que los inversores y usuarios elijan el modelo que más les conviene.
Ventajas de las finanzas descentralizadas (DeFi)
Las finanzas descentralizadas (DeFi) han transformado el sector financiero al facilitar a los usuarios el acceso a servicios y productos financieros de bajo coste a escala mundial. Sin duda, DeFi ofrece muchas ventajas, como:
1. Mayor acceso a los servicios financieros
Una de las principales ventajas de la financiación descentralizada es que aumenta el acceso a los servicios financieros. Esto se debe a que las plataformas financieras descentralizadas se basan en la cadena de bloques Ethereum, a la que puede acceder cualquier persona con conexión a Internet. Cualquier persona con conexión a Internet puede utilizar aplicaciones financieras descentralizadas, independientemente de su ubicación o situación económica.
2. Costes reducidos
Otra ventaja de la financiación descentralizada es que puede reducir costes. ¿Cómo? En primer lugar, porque las plataformas financieras descentralizadas suelen construirse sobre infraestructuras ya existentes, como la cadena de bloques Ethereum. Como resultado, pueden aprovechar la infraestructura existente y no necesitan construir una propia. Puede reducir costes y hacer que las aplicaciones financieras descentralizadas sean más asequibles para los usuarios.
3. 3. Mejora de la seguridad
Las aplicaciones financieras descentralizadas también pueden ofrecer una mayor seguridad en comparación con las aplicaciones financieras tradicionales. Esto se debe a que las plataformas financieras descentralizadas se construyen a menudo sobre la tecnología blockchain, que ofrece un alto grado de seguridad. Además, las plataformas financieras descentralizadas suelen incorporar mecanismos de protección contra el fraude y las actividades malintencionadas.
4. Mayor transparencia
Por último, las aplicaciones financieras descentralizadas son más transparentes que las tradicionales. Esto se debe a que todos los datos y transacciones de una plataforma financiera descentralizada se almacenan en la cadena de bloques, que es de acceso público. Permite a los usuarios ver fácilmente datos y transacciones en una plataforma financiera descentralizada, lo que garantiza una mayor transparencia.
Contras de la financiación descentralizada (DeFi)
En definitiva, aunque las finanzas descentralizadas presentan ciertamente algunas ventajas, aún pueden compensar estos posibles defectos:
1. DeFi aún está en pañales
Las finanzas descentralizadas están aún en pañales, lo que significa que existen muchas incógnitas. Por ejemplo, aún se está determinando cómo las bolsas descentralizadas pueden gestionar grandes volúmenes de operaciones o cómo aguantarán las stablecoins una recesión. Además, muchos protocolos DeFi aún no han sido auditados, lo que significa que podría haber vulnerabilidades de seguridad desconocidas.
2. Falta de regulación
Otro inconveniente del DeFi es que actualmente no está regulado. Esta falta de regulación podría acarrear problemas, como fraudes o manipulaciones. Además, dado que los protocolos DeFi se basan en Ethereum, cualquier problema con Ethereum también podría causar problemas a DeFi.
3. Los contratos inteligentes son complejos
Los contratos inteligentes son complejas piezas de código que alimentan aplicaciones descentralizadas. Al ser complejas, existe un mayor riesgo de que se produzcan errores o fallos. Si se encuentra un fallo en un contrato inteligente, podría tener implicaciones significativas para el protocolo que alimenta. Por ejemplo, el hackeo de Parity Wallet en 2017 provocó la congelación de más de 150 millones de dólares en Ether.
4. Dependencia de Ethereum
Muchos protocolos DeFi se basan en Ethereum, que depende del éxito de Ethereum. Si Ethereum falla, muchos protocolos DeFi también fallarán. Además, como la mayoría de los protocolos DeFi se basan en Ethereum, suelen ser lentos y caros debido a los problemas de escalabilidad de Ethereum.
El futuro de las finanzas descentralizadas (DeFi)
El futuro de las finanzas descentralizadas (DeFi) es brillante. Ya existen proyectos y aplicaciones que utilizan DeFi para revolucionar la forma en que las personas interactúan con su dinero y lo utilizan, desde plataformas de préstamo automatizadas hasta intercambios descentralizados.
A medida que más usuarios sean conscientes del poder al que pueden acceder y aprovechar estas aplicaciones, su adopción no hará sino aumentar en todo el mundo. La naturaleza de código abierto de DeFi facilita más que nunca a los desarrolladores la creación de funciones y características adicionales sobre las aplicaciones existentes y la ampliación de lo que ya es posible en este nuevo paradigma financiero.
Más información sobre el nuevo paradigma financiero aquí.
El resultado será un mundo en el que las personas tendrán un mayor control sobre sus finanzas y un acceso sin precedentes a los servicios financieros digitales.
Conclusión
Las finanzas descentralizadas son un nuevo sector innovador en la industria de las criptomonedas que tiene el potencial de revolucionar la forma en que interactuamos con nuestras finanzas.
Al eliminar a terceros y a las instituciones centralizadas, DeFi permite a los usuarios tener más control sobre su dinero y sus datos. Este cambio podría afectar significativamente al sistema financiero tradicional y a la forma en que utilizamos el dinero a diario. Aunque todavía se encuentra en sus primeras fases, la financiación descentralizada se muestra prometedora como alternativa viable a la financiación tradicional.
